Riesgo de seguridad existencial: Una aproximación a través de escenarios – Mayo 2019- Paper realizado por el Instituto Breakthrough – National Centre for Climate Restoration – es un think tank australiano independiente.
A continuación se reproduce la síntesis - traducción del paper.

Prefacio del Admirante Chris Barrie.
La investigación encargada por el Senado Australiano en 2017-2018 llegó a la conclusión que el cambio climático –CC- es un riesgo nacional existencial, “uno que amenaza la prematura extinción del origen inteligente de la vida en la Tierra o de una permanente y drástica destrucción de su futuro.”
Este paper analiza este riesgo en un escenario de 30 años, analizando la posibilidad real de que la vida humana en el planeta pueda estar en vías de extinción, de la más terrible manera.
Aspectos generales a tener en cuenta:
- El análisis de las amenazas de seguridad relacionadas con el clima dependen significativamente de entender las fortalezas y debilidades de las proyecciones de la ciencia climática. Mucho del conocimiento científico producido para los hacedores de política es conservador y cauteloso.
- El cambio climático representa ahora una amenaza existencial para la civilización humana en el cercano y mediano plazo.
- Se delinea un escenario en 2050 en el cual una aceleración de los impactos del cambio climático generan grandes consecuencias negativas para la humanidad, las cuales no pueden repararse por siglos.
- Es esencial construir un sistema industrial de emisiones cero muy rápido, con la misma rápidez que se empleó en épocas de guerra.
Introducción
El cambio climático es una amenaza que multiplica y acelera la inestabilidad, contribuyendo a retroalimentaciones de ciclos de crisis sociopolíticas y humanitarias. Ya se pueden sentir los impactos en los sistemas de alimentos, el agua, rendimientos de cosecha y suba en el precio de los alimentos por sequías, incendios y malas cosechas volviéndose catalizadores de conflictos en Medio Oriente, el Mahgreb y el Sahel y contribuyendo a la crisis migratoria europea.
Entender y predecir estos eventos depende grandemente en la apreciación de las fortalezas y limitaciones reales de las proyecciones climáticas, y de la aplicación de marcos de manejo de riesgo.
La cautela científica
Los científicos podrían estar equivocándose para el lado del “menor drama”. Durante las dos décadas previas las predicciones científicas en relación al clima subestimaron consistentemente la severidad de lo que realmente pasa.
Este problema persiste en el trabajo del IPCC, cuyo Informes de Evaluación –IE- se basan en modelos generales del clima, que incorporan importantes procesos climáticos, pero no incluye todos los procesos que pueden contribuir a retroalimentaciones dentro del sistema, eventos extremos compuestos y abruptos y/o cambios irreversibles.
Otras formas de conocimiento son minimizadas, incluyendo la paleoclimatología, consejos de expertos, y modelos semiempíricos. El IPCC presenta resultados de modelos complejos detallados y cuantificados, pero cuando nota resultados más severos, no lineales, que son posibilidades de cambio de sistema, los expresa no cuantitativamente sino en una forma descriptiva. Estos enfoques reciben menos atención por parte de los medios pero son los que podrían llevarnos a los resultados más devastadores y difíciles de cuantificar.
Por ej. El informe del IPCC de 2014 predice un aumento del nivel del mar de entre 0.55 y 0.82 para 2100, y dice que “los niveles por encima de este rango no puede ser evaluados confiablemente”. Pero para tener una comparación, el Departamento de Defensa Americano maneja dos escenarios, uno con una elevación de 2 mts para 2100, y el escenario extremo es de 2.5mts para ese mismo año.
Otro ejemplo. En el informe reciente, el IPCC reporta que el calentamiento podría continuar a una tasa de 0.2°C por década y alcanzar los 1.5°C alrededor de 2040. Sin embargo el límite de 1.5°C será probablemente pasado en la mitad de ese tiempo, cerca de 2030, y el límite de 2°C alrededor de 2045, debido a la aceleración de las emisiones y cambio en las condiciones de circulación oceánicas.
Riesgo existencial
Con los compromisos efectivos del Acuerdo de Paris de 2015 (que tiene una intención teórica de no sobrepasar los 2°C), vamos a un calentamiento de 3°C o más para 2100. Pero este número no incluye retroalimentaciones del ciclo de carbón de largo plazo. Teniendo en cuenta estas retroalimentaciones lo acordado en Paris nos llevará a un calentamiento de 5°C para 2100.
Los científicos advierten que un calentamiento de 4°C es incompatible con una comunidad global organizada, es devastador para la mayoría de los ecosistemas, y tiene una alta probabilidad de no ser estable. El Banco Mundial dice que esta temperatura nos pone “más allá de la adaptación”. Pero, hay que resaltar que, a niveles significativamente menores existe una amenaza existencial para muchas personas y regiones.
El profesor emérito del Instituto Postdam, Hans Joachim Schellnuhuber dice que si continuamos en este camino “hay un gran riesgo que terminemos con nuestra civilización. La especie humana sobrevevirá de alguna forma pero destruiremos todo lo que construimos por 2000 años”.
Las proyecciones del cambio climático tienen una distribución estadística de “cola gorda” con una gran probabilidad de calentamiento que está muy por encima del valor promedio predicho por los modelos climáticos, y son de una probabilidad más elevada de lo que se hubiese esperado bajo asunciones estadísticas típicas.

A) Probabilidad de ocurrencia del evento, B) impacto, C) riesgo. Eventos de probabilidad más baja en la parte alta del final de la distribución de probabilidad tiene el riesgo más alto. Cuando hay una cola pesada o gorda en los bordes indica una irregularmente alta probabilidad de un evento catastrófico.
Esta es una preocupación particular porque podría desatar lo que se denominan “tipping points” o puntos de inflexión, es decir la posibilidad de pasar determinados umbrales que resultarían en cambios pronunciados en el sistema climático que serán irreversibles en escala de tiempo humanas –como por ejemplo el derretimiento de las capas de hielo polares (y el aumento del nivel del mar), dejando al permafrost al descubierto y otros reservorios de carbón. A partir de estas situaciones los impactos del calentamiento global se transforman en no lineales y difíciles de modelar con los conocimientos científicos actuales. NT: Es decir mientras que en los modelos lineales a un determinado cambio en x se puede predecir una consecuencia x, en los modelos no lineales esta posibilidad desaparece y las consecuencias son impredecibles por la complejidad de los fenómenos que se desatan.
Recientemente se está prestando atención a un escenario que se conoce como “hothouse” o de “Tierra invernadero” en el cual el sistema de retroalimentación y la interacción mutua podría llevar al sistema climático terrestre a un punto de no retorno, donde el calentamiento se produciría sólo. Este escenario podría producirse con un aumento de temperatura de tan sólo 2°C, y más bajo probablemente también.
Manejo de riesgo existencial
¿Cuáles son los peores escenarios posibles? Están los científicos autocensurándose para evitar hablar de los posibles resultados poco placenteros? Evitan los científicos hablar de los casos más alarmantes para no desmotivar a la gente?
Estas distribuciones de cola gorda tienen probabilidades que son más altas de lo que generalmente se entiende.
Las evaluaciones de riesgo son el producto de la probabilidad y el daño, pero cuando el daño está más allá de la cuantificación, cuando estamos frente a riesgos existenciales, aprender de los errores no es una opción.
Lo que se necesita es un enfoque de riesgo basado en las probabilidades de la gama alta de riesgos, en las posibilidades sin precedentes, en vez de evaluar las probabilidades promedio sobre la base de la experiencia histórica.
Los riesgos existenciales requieren basarse en un marco cualitativo y moral. La acción está determinada por el imperativo de logar el objetivo. Por lo cual calcular probabilidades tiene poco sentido en las instancias más críticas. En vez de eso, tenemos que identificar posibilidades, esto es, desarrollos potenciales en la estructura planetaria que sean consistentes con las condiciones y límites iniciales.
2050- un escenario
Escenario 2020 -2030: los gobiernos no actúan en la evidencia que el Acuerdo de Paris, nos lleva a un camino de al menos 3°C de calentamiento. La oportunidad de un cambio de sistema para tener una chance de mantener el calentamiento bien por debajo de los 2°C es ignorada. Como proyectan Xu y Ramanathan en su paper, para el 2030 los niveles de CO2 alcanzan las 437 partes por millón, lo que es sin precedentes en los últimos 20 millones de años, y el calentamiento alcanza los 1.6°C.
Escenario 2030 – 2050: las emisiones alcanzan un pico en 2030 y empiezan a caer de acuerdo con una reducción del 80% en el uso de combustibles fósiles para el 2100 (en comparación con el 2010). Esto lleva a un calentamiento de 2.4°C para el 2050 consistente con el escenario “línea de base rápida” del paper de Xu y Ramanathan. Sin embargo la temperatura se incrementa otros 0.6°C - llegando a un total de 3°C en 2050- debido a una activación de retroalimentaciones del ciclo de carbono, niveles más elevados de albedo (esto se da al derretirse los hielos que son blancos y reflejan más los rayos solares que las superficies que están debajo) y otras retroalimentaciones que los modelos corrientes no asumen.
Debe notarse que este escenario está lejos de ser uno extremo: el escenario de baja probabilidad y alto impacto de calentamiento (5% de probabilidad) en el paper de Xu y Ramanathan es que la temperatura puede exceder los 3.5 – 4°C en el 2050.
Escenario 2050: hay una amplia aceptación científica que puntos de inflexión del sistema (tipping points) en relación a la capa de Hielo Antártico occidental y a tener un verano en el Ártico sin hielo se pueden pasar bastante antes de los 1.5°C de calentamiento, para la capa de hielo de Groenlandia bastante antes de los 2°C, y para la pérdida extendida de permafrost y para una sequía de larga escala y extinción paulatina del Amazonas para los 2.5°C. Por lo tanto para este escenario, en 2050 el efecto de “Tierra invernadero” se produjo y la Tierra va rumbo a otro grado o más de calentamiento, especialmente dado que las emisiones de gases antropogénicas son todavía significativas.
Mientras los niveles de mar se elevaron 0.5 mts para 2050, el incremento para 2100 es de 2-3 mts, y analizando registros históricos paleoclimáticos se entiende que pueden llegar a levantarse más de 25 mts.
De esta forma 35% de la tierra global, y 55% de la población mundial están sujetos a más de 20 días de condiciones de calor letal, más allá del umbral de la supervivencia humana.
La desestabilización de la Jet Stream ha afectado significativamente la intensidad y la distribución geográfica de los monsones asiáticos y africanos y, juntos con la desaceleración de la Corriente del Golfo impacta en los sistemas de soporte de vida europeos. Norte América sufre eventos climáticos extremos devastadores, incluyendo incendios, olas de calor, sequías e inundaciones. Los monzones de verano en China fallan y disminuyen severamente las aguas que fluyen a los grandes ríos de Asia por la pérdida de más de 1/3 de las capas de hielo del Himalaya. La pérdida de los glaciares alcanza el 70% en los Andes, y las lluvias en México y Centro América se reducen a la mitad. Condiciones semi permanentes de El Niño prevalecen.
Emerge la aridificación de más del 30% de la superficie terrestre. La desertificación es severa en el sur de África, el sur del mediterráneo, oeste de Asia, medio oriente, el interior de Australia y el sudoeste americano.
La mayoría de las regiones del mundo ven una significativa caída en la producción de alimentos y un incremento en el número de eventos extremos. La producción de alimentos es inadecuada para alimentar a la población mundial y los precios de los alimentos se incrementan mucho como consecuencia de la declinación de 1/5 del rendimiento de las cosechas, la caída de los contenidos nutricionales y una declinación catastrófica de la población de insectos, falta crónica de agua y condiciones demasiado calurosas para la vida humana en muchas regiones.
Los tramos bajos de los deltas agrícolas como el Mekong, el Nilo y el Ganges se inundan y significativos sectores de algunas de las ciudades más populosas como Chennai, Mumbai, Jakarta, Guangzhou, Tianjin, Hong Kong Shangai, Lagos Bangkok y Manila son abandonadas. Algunas islas se vuelven inhabitables. 10% de la población de Bangladesh es desplazada por las inundaciones.
Aun con 2°C de calentamiento, más de un billón de personas van a tener que ser relocalizadas en un escenario de gama alta de riesgo. La escala de destrucción está más allá de nuestra capacidad de modelar, con una alta probabilidad de que la civilización humana termine.
Consecuencias para la seguridad nacional
Por razones prácticas, y porque es compatible con nuestros escenarios, el informe toma las conclusiones de “La era de las consecuencias “Escenario severo de 3°C” desarrollado por un grupo de oficiales Seniors de seguridad nacional de Estados Unidos en 2007:
“Eventos no lineales no masivos en el medioambiente global generan eventos sociales no lineales masivos. En este escenario, las naciones alrededor del mundo van a verse abrumadas por la escala del cambio y los perniciosos desafíos, tales como pandemias masivas. La cohesión interna de las naciones estará bajo grandes presiones, incluyendo los Estados Unidos, tanto por el resultado del dramático aumento de los niveles del mar como por los cambios en los patrones agrícolas y la disponibilidad de agua. La inundación de las comunidades costeras alrededor del mundo especialmente en Holanda, los Estados Unidos, Sur de Asia y China tiene el potencial de desafiar las identidades nacionales y regionales. Conflictos armados entre las naciones sobre los recursos, como con el río Nilo y sus tributarios es probable y la guerra nuclear es posible. Las consecuencias sociales van desde incremento del fervor religioso a caos total. En este escenario, el cambio climático provoca un cambio permanente en la relación entre la humanidad y la naturaleza".
Autores:
David Sparatt - es el Director de Investigación de Breakthrough National Center for Climate Restoration
Ian Dunlop - Ian Dunlop fue anteriormente ejecutivo internacional de la industria del petróleo, el gas y el carbón, presidente de la Australian Coal Association y director ejecutivo del Australian Institute of Company Directors. Es miembro senior del consejo asesor del Breakthrough National Center for Climate Restoration. David Spratt es el Director de Investigación de Breakthrough.