top of page
  • Foto del escritorHomo consciens

El descenso del número de espermatozoides "amenaza la supervivencia humana"




Fuente: The Guardian - Febrero 2021

La epidemióloga Shanna Swan afirma que el bajo recuento y los cambios en el desarrollo sexual podrían poner en peligro a la especie humana


La disminución del número de espermatozoides y los cambios en el desarrollo sexual están "amenazando la supervivencia humana" y conduciendo a una crisis de fertilidad, ha advertido una destacada epidemióloga.


En un nuevo libro, Shanna Swan, epidemióloga ambiental y reproductiva de la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí de Nueva York, advierte que la inminente crisis de fertilidad supone una amenaza global comparable a la de la crisis climática.


"El estado actual de los asuntos reproductivos no puede continuar mucho más tiempo sin amenazar la supervivencia humana", escribe en Count Down.


Llega después de que un estudio del que fue coautora en 2017 descubriera que el número de espermatozoides en Occidente se había desplomado en un 59% entre 1973 y 2011, lo que hizo que fuera noticia a nivel mundial.


Ahora, dice Swan, siguiendo las proyecciones actuales, los recuentos de esperma llegarán a cero en 2045. "Eso es un poco preocupante, por decir lo menos", dijo a Axios.


En el libro, Swan y la coautora Stacey Colino exploran cómo la vida moderna está amenazando el recuento de esperma, cambiando el desarrollo reproductivo masculino y femenino y poniendo en peligro la vida humana.


Señalan el estilo de vida y las exposiciones químicas que están cambiando y amenazando el desarrollo sexual y la fertilidad humana. Tal es la gravedad de las amenazas que plantean, argumenta, que los humanos podrían convertirse en una especie en peligro de extinción.


"De los cinco criterios posibles para que una especie esté en peligro de extinción", escribe Swan, "sólo es necesario que se cumpla uno; el estado actual de los humanos cumple al menos tres".


 

Reseña del libro "Cuenta atrás"


CÓMO NUESTRO MUNDO MODERNO ESTÁ AMENAZANDO LA CANTIDAD DE ESPERMATOZOIDES, ALTERANDO EL DESARROLLO REPRODUCTIVO MASCULINO Y FEMENINO, Y PONIENDO EN PELIGRO EL FUTURO DE LA RAZA HUMANA

POR SHANNA SWAN CON STACEY COLINO ‧ FECHA DE PUBLICACIÓN: 23 DE FEBRERO DE 2021


Un examen urgente de un problema mundial que requiere mucha más atención de la que recibe actualmente.


A pesar de la idea generalizada de que la superpoblación es uno de los problemas más acuciantes de nuestro planeta, las tasas de fertilidad humana están disminuyendo rápidamente. Sin un esfuerzo global concertado para revertir esta tendencia, la supervivencia humana a largo plazo puede estar en riesgo, según la reconocida epidemióloga y experta en salud pública Swan. La autora fue noticia en 2017 cuando publicó un "meta-análisis sobre el descenso del número de espermatozoides en los países occidentales." Su estudio se convirtió en uno de los más citados de la historia, lo que lo convirtió en un tema candente entre los científicos y el público. A pesar de la atención prestada, las causas demostradas del descenso de la fertilidad -entre las que se encuentran las sustancias químicas tóxicas que se transfieren de los productos y alimentos cotidianos a nuestro organismo- siguen siendo un problema. En este libro, impecablemente investigado y convincente, el autor sostiene que si la tendencia de la sociedad hacia una tasa de fertilidad por debajo del nivel de reemplazo continúa al ritmo actual, los seres humanos podrían convertirse en una especie en peligro de extinción. "De los cinco criterios posibles para que una especie esté en peligro de extinción", escribe, "sólo es necesario que se cumpla uno; la situación actual de los humanos cumple al menos tres". La pasión de la autora por su trabajo y el acceso a montones de datos alarmantes hacen que la lectura sea fascinante, y su escritura es nítida y no está obstruida por la jerga. Al escribir sobre la falta de concienciación respecto a los productos químicos de uso común que perjudican a los seres humanos y al medio ambiente -por no hablar de las políticas para limitarlos o eliminarlos-, se pregunta con justificada rabia: "¿Dónde está la indignación en este asunto?". Reconociendo el ritmo glacial del cambio institucional, Swan esboza cómo la gente puede tomar medidas concretas para protegerse ahora y cómo el cambio positivo tiene efectos dominantes a largo plazo que benefician a las generaciones futuras. Con el brío de un defensor y la confianza informada de un científico, el autor hace "un llamamiento para que todos hagamos lo que podamos para salvaguardar nuestra fertilidad, el destino de la humanidad y el planeta".


Un texto revelador, perturbador, empoderador y esencial.


 


Swan ofrece consejos sobre cómo protegerse de los productos químicos perjudiciales e insta a la gente a "hacer lo que podamos para salvaguardar nuestra fertilidad, el destino de la humanidad y el planeta".


Entre 1964 y 2018 la tasa de fertilidad mundial se redujo de 5,06 nacimientos por mujer a 2,4. Ahora, aproximadamente la mitad de los países del mundo tienen tasas de fertilidad por debajo de 2,1, el nivel de reemplazo de la población.


Aunque es probable que la anticoncepción, los cambios culturales y el coste de tener hijos sean factores que contribuyen a ello, Swan advierte de los indicadores que sugieren que también hay razones biológicas, como el aumento de las tasas de abortos espontáneos, el aumento de las anomalías genitales entre los niños y el adelanto de la pubertad en las niñas.


Swan culpa a las "sustancias químicas en todas partes", presentes en los plásticos, los cosméticos y los pesticidas, que afectan al sistema endocrino, como los ftalatos y el bisfenol-A.


"Las sustancias químicas de nuestro entorno y las prácticas de estilo de vida poco saludables de nuestro mundo moderno están alterando nuestro equilibrio hormonal, causando diversos grados de estragos reproductivos", escribe.


También dijo que factores como el tabaquismo, la marihuana y la creciente obesidad juegan un papel importante.



Encontranos en las redes sociales de Climaterra

  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
bottom of page