Fuente: Bloomberg - Por Laura Millán Lombrana - - Con la ayuda de Akshat Rathi Septiembre de 2020
Los incendios ardieron de enero a agosto de este año generaron emisiones equivalentes a las de un país de tamaño medio.
El Ártico ha experimentado la peor temporada de incendios de la que se tenga constancia por segundo año consecutivo, con incendios forestales gigantescos que emitieron un tercio más de dióxido de carbono a la atmósfera que el año pasado.
Los incendios que asolaron el Círculo Ártico emitieron 244 millones de toneladas de dióxido de carbono durante los primeros 6 meses del año, en comparación con 181 millones de toneladas para todo el año 2019, según el Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copérnico de Europa o CAMS.
Fuente: Adam Vaughan - @adamvaughan_uk
"Sabemos desde hace tiempo que la tasa de cambio de clima y temperatura en las latitudes septentrionales ha sido dos o tres veces más rápida que la media mundial", dijo Mark Parrington, científico principal del CAMS. "Lo que estamos viendo ahora es un síntoma de esa tasa de cambio más rápida".
El rápido calentamiento del Ártico se ha manifestado en los últimos meses a través de olas de calor que han roto los récords de temperatura. Al mismo tiempo, los satélites mostraron que el hielo marino se redujo más que durante cualquier otro julio de la historia. El hielo más delgado en las aguas del Ártico significó que la Ruta Marítima Septentrional, que se utiliza durante los meses de verano para transportar gas, petróleo y metales desde el norte de Rusia hasta China, se abrió antes de lo habitual este año.
Las emisiones de los incendios del Ártico, algunos de los cuales todavía están en llamas, fueron tan altas que en sólo seis meses la región emitió el equivalente de lo que países como España, Malasia, Egipto o Ucrania emitieron en 2018 por la quema de combustibles fósiles, según los últimos datos disponibles del Proyecto Mundial del Carbono.
La mayoría de los incendios se produjeron en la República de Sakha en Rusia, mientras que la actividad de los incendios se redujo en el norte de Canadá y Alaska en comparación con el año pasado, según Copérnico. Las columnas de humo de los incendios de Siberia se extendieron a lo largo de miles de kilómetros, cubriendo el equivalente a más de un tercio de Canadá.
Los científicos creen que los llamados "incendios zombies" que se originaron el año pasado pueden haber estado ardiendo bajo tierra durante los meses de invierno y se volvieron a encender en primavera cuando una ola de calor golpeó la región. "Una vez que estos incendios se inician en esa parte del mundo pueden arder durante un largo período de tiempo", dijo Parrington. "No me sorprendería que volviéramos a ver algo similar el año que viene."
Los incendios en el oeste de EE.UU. siguen activos, y los datos del CAMS muestran que la intensidad de los incendios en Colorado ha estado hasta ahora muy por encima de la media de 2003-2019 durante la mayor parte de agosto. En California, los datos muestran que las emisiones de los incendios alcanzan su punto máximo en la segunda mitad del mes, lo que no es sorprendente, dado que dos de los mayores incendios del estado comenzaron a finales de agosto.
En América del Sur por otra parte, los incendios están acechando a Argentina, Paraguay y Brasil en parte intencionales pero ayudados por la intensa sequía que está asolando la región por el cambio climático.
Aún así, el principal impulsor de las emisiones globales de los incendios forestales proviene de los incendios que ocurren en el trópico. Una estación seca más húmeda de lo habitual en el sudeste asiático significa que los incendios en Indonesia podrían ser menores este año. "En general, vemos algunas anomalías regionales pero a escala mundial hasta ahora las cosas no son tan anómalas como el año pasado", dijo Guido van der Werf, un científico de la Vrije Universiteit de Amsterdam que también hace un seguimiento de las emisiones de carbono de los incendios forestales.
Las emisiones de fuego de la Amazonia brasileña este año son comparables a las del año pasado, dijo Van der Werf. Pero la temporada de incendios en esa parte del mundo todavía está en marcha, por lo que las emisiones por incendio para todo el año dependerán de cómo se desarrolle el resto de la temporada de incendios en el Amazonas.
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