Autor: Alejandro Thamm para Climaterra – Febrero de 2021
Muchas veces se habla de los tipping points climáticos - que serían más bien puntos de pérdida del equilibrio o puntos de no retorno, que puntos de inflexión. Estos son puntos a partir de los cuales, un sistema en equilibrio se comienza a comportar de una manera completamente diferente a la que tenía hasta ahora, buscando un nuevo equilibrio diferente al que buscaba antes.
Un ejemplo clásico, de este fenómeno, es el de ir subiendo una colina en bicicleta. Mientras subimos, debemos hacer un esfuerzo para avanzar, ya que la fuerza de la gravedad nos empuja hacia atrás (hacia abajo). Cuando estamos alcanzando la cima, notamos que no es necesario hacer ya ningún esfuerzo. Pero ni bien pasamos la cima, notamos que ahora no sólo no es necesario hacer fuerza en los pedales, sino que debemos aplicar los frenos, si no queremos tomar demasiada velocidad y estrellarnos. Ahora la gravedad nos empuja hacia adelante (hacia abajo). ¿Qué ha pasado? ¿han cambiado las reglas? No, las reglas - las leyes de la física - no han cambiado – como ya dijimos: la gravedad siempre empuja hacia abajo -, es sólo que en el contexto de nuestro camino y de la colina, lo que antes era una fuerza que nos impedía avanzar, es ahora una fuerza que nos impulsa hacia adelante. En ambos casos, el punto de equilibrio estático (o estable) se encuentra en la parte llana, no sobre la colina. Sólo recordemos la primera vez que subimos una colina en bicicleta, la sorpresa que nos dimos.
Otro ejemplo fácil de comprender, es el de colgar de una rama de un árbol, un peso cada vez mayor: inicialmente la rama resistirá, y hará fuerza hacia arriba, como para volver a su posición inicial, quizás se flexione un poco, pero si aumentamos el peso, y lo seguimos aumentando, en un momento la rama cederá y se doblará o quebrará, y ahora el punto de equilibrio será cuando el peso - y la rama - lleguen al suelo.
Casi todos los sistemas naturales que conocemos se encuentran en algún tipo de equilibrio dinámico como en los dos ejemplos anteriores.
Veamos dos ejemplos de puntos de inflexión climáticos
Derretimiento del Permafrost, y liberación de metano
Los suelos de permafrost, como su nombre lo indica, se encuentran permanentemente congelados (todo el año, todos los años), algunos son muy ricos en contenido de materia orgánica, y contienen burbujas de gas metano – producto de la descomposición de la materia orgánica - atrapada en el hielo. Conforme avanza el calentamiento global, estos suelos comienzan a descongelarse. El metano que estaba atrapado en burbujas en el hielo se libera a la atmósfera, y cómo es un gas de efecto invernadero que es unas 28 veces más poderoso que el CO2, se incrementa el efecto invernadero, aumenta más la temperatura de la tierra, se descongela más permafrost, y se produce lo que se conoce como realimentación positiva, que significa que el sistema se desestabiliza, y el aumento de la temperatura podría llegar a hacer que todo el permafrost se descongele, hasta que ya no se libere más metano a la atmósfera. Cabe aclarar que como el clima de la tierra no depende únicamente del metano encerrado en el permafrost, el clima podría en realidad estabilizarse de otra forma, antes que todo el permafrost se descongele.
Metano atrapado bajo un lago congelado
Derretimiento de los casquetes polares y reducción de albedo
Otro ejemplo de punto de inflexión, es por ejemplo el derretimiento de las cubiertas de hielo polares. Esto es lo que se llama pérdida de hielo por albedo. El albedo es una medida de la reflexión de la energía radiante del sol que incide en un cuerpo. Un cuerpo que refleje toda la radiación solar que recibe, tendrá un albedo de 1, en tanto que uno que la absorba totalmente tendrá un albedo de 0.
La pérdida de hielo en los casquetes polares, ocurre tanto con los hielos que están sobre los mares - en los casquetes polares del Ártico - como sobre rocas - como en el caso de la cubierta de hielo sobre la Antártida -. En ambos casos, la cubierta de hielo, es muy blanca, y refleja la luz en gran medida (albedo alto: entre 0,5 y 0,7 para hielo y hasta 0,9 para hielo cubierto por nieve), por lo que el sol, calienta poco esa superficie. A media que aumenta la temperatura media de la tierra, y parte de este hielo se derrite, queda expuesto el mar o la roca bajo el hielo, y como estos con de color más oscuro, reflejan menos la luz solar, absorben más calor (albedo más bajo: sólo 0,06 para el mar), y esto favorece que se funda más y más hielo, en un proceso donde nuevamente se observa realimentación positiva.
El hielo se está derritiendo a velocidades cada vez mayores
No todos los puntos de inflexión climáticos se relacionan con sistemas donde se produce realimentación positiva (desestabilizante). Algunos pueden ser procesos en los que simplemente ya no hay marcha atrás, como por ejemplo cuando rompemos la cáscara de un huevo.
Otros puntos de inflexión, según los expertos, son:
Sequías mas frecuentes en la selva Amazónica
Reducción de la circulación de la corriente oceánica del Atlántico
Incendios y cambios en la pestes que afectan a los bosques de América del Norte
Muerte masiva de corales en los arrecifes del pacífico
Dejo aquí algunas notas publicadas en Climaterra que hablan sobre los puntos de inflexión: